Gran programa el que se pudo ver el sábado pasado en el Polideportivo de Lekunberri, donde a los doce combates “interclubes” en los que púgiles que comienzan su andadura en el boxeo dan sus primeros pasos sobre el cuadrilátero, se añadieron tres más de rango amateur y uno más profesional.
Durísimo combate para Iordanov
Comenzando por las peleas de categoría aficionada, los boxeadores navarros alcanzaron el triunfo en dos de ellas y en la tercera la cosa acabó en “tablas”. En primer lugar, Ander Amatriain, venció a los puntos al bilbaíno Diego Valtierra y después David Soria hizo lo propio y por idéntica calificación al zaragozano Guillermo Carvallo.
Para acabar con esta tanda de combates, la igualada pelea entre el luchador del Kanku burladés, Andrés Unzue y el del Adaka chantreano Jon Ferreras fue considerada nula por los jueces de la velada.
Como brillante remate a la cita lekunberritarra, arribó el combate profesional del peso crucero (-91 kilos), que colocó en un rincón al navarrobúlgaro del Gimnasio Kanku, Marin “Aizkora” Iordanov y en el opuesto a un boxeador de primer nivel, el rumano Gheorge Danut, cuyas credenciales venían intactas tras ganar por KO su último combate ante el catalán Diego “Thor” Torrente.
La pelea obedeció a la previa y Marin obtuvo una dura y “sudada” victoria ante un contrincante que en el primer asalto “se las puso tiesas” al púgil del maestro Eguzkiza; como así pudieron constatar los allí presentes a la vista del lastimoso estado en el que quedó la nariz y el ojo izquierdo del boxeador del Kanku.
Pero “Aizkora” no había dicho aun su última palabra y en los tres siguientes asaltos se fajó de lo lindo para enjuagar la ventaja del rumano y apuntarse con claridad la victoria a los puntos en un combate que seguro le catapultará hacia empresas mayores.