De una día para otro, hubo que cambiar el frontón por el comedor, ¿de qué manera estás haciendo más llevadero el confinamiento?

Ahora en lugar de pala de madera y pelota de cuero uso pala y pelota de ping pong (Rie). Bromas aparte, no me cuesta adaptarme a nuevos escenarios y por ahora estoy bastante cómodo. Procuro llevar unos horarios de sueño, comidas y tareas que no hagan que me abandone. Dejo un rato para hacer ejercicio, otro para hacer asuntos de mi trabajo, otro para ver películas que tenía pendientes, etc. Variando lo máximo posible para que se me haga más ameno. 

Aunque en condiciones más limitadas, ¿continúas con tu planificación deportiva?

Por supuesto. El hecho de dedicarme profesionalmente al entrenamiento deportivo hace que no me cueste adaptar el espacio y material disponible en casa para seguir con los objetivos de mi entrenamiento físico.

¿Qué tipos de ejercicios puedes hacer en casa?

Infinitos. El movimiento humano es tan rico que conociendo cómo funciona y los objetivos que tenga cada uno, los ejercicios salen solos. Si además puedes disponer de alguna mancuerna como en mi caso, no hace falta nada más. Dadas mis necesidades particulares, estoy haciendo un entrenamiento más enfocado al desarrollo de la fuerza. Es mi punto débil y toca trabajarlo. 

¿En algún momento has sentido enfado, frustración o desconcierto?

Sí, en el momento en que enciendo la televisión y veo a "pseudoperiodistas" echando leña al fuego, políticos incompetentes, etc. Por eso procuro hacerle el menor caso posible. Me sigo informando, pero no a través de la caja tonta. Ahí solo prima el morbo y a mí eso no me va. 

¿Sueles grabarte entrenando? ¿Te ayuda a mantener la rutina, motivarte o motivar al resto de compañeros?

Sí que me grabo, pero no para mí ni para mis compañeros. Si no para que las personas con las que estoy trabajando tengan material para hacer ellas en casa o hacerme publicidad en redes sociales. 

El entrenamiento me lo tomo como el comer. Me da igual si estoy motivado o no; hay que hacerlo. A partir de ahí, cualquier cosa que me lo haga divertido siempre es bienvenida: música, hacerlo en compañía, etc. 

¿A qué competiciones, de momento, no vas a poder acudir?

Pues para empezar y para mí la más importante, la fase final del Campeonato de España de Clubes en División de Honor. Es la primera vez que consigo meterme y estoy con unas ganas terribles. No sé qué pasará a partir de ahora, si se aplazará o se suspenderá. Además, ahora venían también todas las competiciones con la selección navarra, empezando por el torneo GRAVNI. Todo está en el aire hasta nuevas noticias. 

¿Qué te parece el aplazamiento de los Juegos Olímpicos?

No presto atención si son los Juegos Olímpicos o el cumpleaños de un familiar mío. Si la situación lo requiere, me parece correcto. Claro que da pena, pero la salud pública siempre va por delante. 

¿Qué mensaje lanzarías desde aquí al resto de compañeros y deportistas?

No soy nadie para aconsejar a otros, pero a mí me ayudan tres palabras: tranquilidad, adaptación y movimiento. Tranquilidad porque esto va para largo y conviene no desesperar, adaptación al nuevo escenario y buscar otras formas de trabajo, entrenamiento y ocio; y movimiento en cuanto a no pararnos, seguir haciendo cosas que nos llenen y nos mantengan activos. 

A nivel más personal, ¿Cómo estáis viviendo esta situación en casa?

Si te soy sincero, de maravilla. Soy bastante casero, tengo buena compañía en casa y estoy aprovechando para ponerme al día con muchas cosas pendientes que tenía. Claro que me da pena no salir a la calle o no poder estar con la gente con la que estoy trabajando, pero lo que no voy a hacer es lamentarme o frustrarme por cosas que no dependen de mí. 

¿Qué es lo que más echáis de menos?

La pelota, salir a la calle y hacer vida social con mi gente. 

¿Has encontrado alguna cosa de la que ya no te acordabas?

Sobre todo, la tranquilidad y tiempo para mí. Al final el día a día te va llevando con sus tareas y obligaciones y apenas encontramos un momento en el que podamos olvidar el tiempo y estar a nuestras cosas con toda la calma del mundo. También estoy recuperando el cine. Hacía tiempo que no veía películas y ahora voy a una diaria (ríe) 

¿Cómo pasáis el rato? 

Estoy haciendo mil cosas: limpiando el piso, creando una página web de mi proyecto desde cero, entrenando, asesorando a clientes, viendo cine, escuchando música, manteniendo activas mis relaciones, etc. 

¿Cuál es vuestro pasatiempo favorito?

Ver películas y escuchar música. 

¿Cuál es tu opinión acerca de todo lo que está pasando en el mundo con esta enfermedad?

Creo que este virus está poniéndonos contra un espejo como sociedad. Lo vulnerables que seguimos siendo ante la naturaleza, retratarnos cuando criminalizamos a quienes huyen de guerras y hambre, la falta de visión de bien común como especie para hacer una respuesta conjunta que beneficie al mundo, la importancia real que tiene invertir en servicios públicos y un largo etcétera. Estamos verdes, muy verdes. 

¿Ves una salida cercana?

Estoy asumiendo que hasta mayo no salgo de casa (ríe) no tengo ni idea de cómo avanzará todo esto. Tranquilidad. 

¿Nos cambiará la forma de ver la vida después de esta situación?

Ojalá fuera así, pero estoy convencido de que no. Tenemos poca memoria y somos bastante egoístas. No hay más que ver la vuelta de muchas ideas que en su momento causaron mucho daño al mundo como el fascismo o la indiferencia ante quienes hoy en día sufren lo mismo por lo que nosotros en su día pasamos. Nos olvidamos rápido de lo que no nos interesa. Espero equivocarme.

¿Qué es lo primero que vas a hacer cuando se levanten todas las restricciones y hayamos vencido al virus?

Una buena comida con mi familia, un buen partido de pelota y una buena cena con mi cuadrilla.