Según recoge el ‘Estudio sobre la gestión de la protección animal en España’ impulsado por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, solo el 12,9% de los perros que entran a los centros de acogida son de raza de caza

Madrid, 3 de noviembre de 2025. La Real Federación Española de Caza (RFEC) y las federaciones autonómicas de caza celebran que el Gobierno haya desmentido con datos oficiales el falso relato del abandono masivo de perros de caza, y han iniciado acciones para exigir a los medios de comunicación, representantes públicos y organizaciones políticas que se atengan a la verdad antes de criminalizar a los cazadores.

Por primera vez, el propio Ejecutivo ofrece datos verificables y públicos que confirman lo que el sector cinegético lleva años defendiendo: la caza no es el problema del abandono animal en nuestro país. Según el informe del Ministerio de Asuntos Sociales y Agenda 2030, en 2023 se registraron 15.216 perros perdidos o abandonados en toda España, una cifra que incluye todas las razas y circunstancias —desde extravíos temporales hasta robos o entregas voluntarias—, por lo que el número real de abandonos es incluso menor.

De ese total, solo un 12,9 % corresponde a razas de caza, lo que equivale a 2.422 perros recogidos, de los cuales 1.965 serían realmente extraviados o abandonados. En el caso de los galgos, el porcentaje baja al 2,8 % (unos 425 animales).

En total, menos de 3.000 perros de razas de caza realmente perdidos o abandonados en toda España frente a los 50.000 que difunden algunas organizaciones animalistas. Una diferencia abismal que evidencia la manipulación sistemática de la verdad y el daño reputacional causado al colectivo de cazadores.

Desde las federaciones de caza se denuncia que, durante años, grupos políticos, partidos y medios de comunicación han difundido sin contrastar un relato falso y profundamente injusto, que ha estigmatizado a miles de cazadores y puesto bajo sospecha a quienes más cuidan, respetan y valoran a sus perros.

“El propio Gobierno ha hablado. Los datos son oficiales, públicos y verificables. Ya no caben excusas ni interpretaciones ideológicas. Pedimos a los responsables públicos y a los medios de comunicación que sean rigurosos, que contrasten la información y que no vuelvan a criminalizar al sector cinegético con bulos interesados”, subrayan las entidades.

La RFEC y las federaciones autonómicas de caza coinciden en que este informe “marca un antes y un después”, porque desmonta de forma definitiva el mito del abandono masivo de perros de caza y da la razón a quienes llevan años reclamando datos objetivos frente a la propaganda animalista.

“Los cazadores somos los primeros interesados en el bienestar de nuestros perros. Son nuestra herramienta, nuestra familia y nuestro orgullo. Los cuidamos, los alimentamos y los protegemos. La verdad ya está sobre la mesa; ahora exigimos que se respete”.